Automatismos

§ 0

Alguna vez fui niña e intenté olvidarme de los pájaros.
Pensar en las nubes como tiempos abiertos a un remoto castillo de papel, me hacía volver loca entre las paredes de la casa en la que vivía con mi madre.
Tampoco fueron buenas las temporadas de vigilia donde rostros ajenos nacían en mi cama todas las noches.

Torpes intentos de salvar mis palabras en plegarias hicieron de esa niña una historia de sombras.
Ahora son rostros amados en la memoria. Aquellos sueños que comían de mis sábanas cuando el mundo parecía tan quieto que los ciegos podían caminar sin titubeos.

Alguna vez, cuando niña, fui adulta.
Y temí quedarme quieta entre tanto terremoto dentro de una familia ahuecada por el abandono.
Pero pensar en los pájaros empeoraba cualquier situación capaz de aumentar las probabilidades de sol.
Entonces abri una puerta, traspasé la línea, la cerré y metí las llaves en un frasco de vidrio que luego, con los años, se rompió para dejarme volver y desatar los nudos.

Después de tanto reloj, enseñándome como caminar derecha tras aquella muerte, volví y desaté nudos.

Pero también me acaricié el rostro
y me pedí perdón
y me dije niña, sin miedo a no poder serlo.

What's this?

You are currently reading Automatismos at todos los bordes dentados.

meta

§ Leave a Reply